Hola. Tras un largo tiempo sin escribir en el blog, vuelvo a
hacerlo para contaros una experiencia muy gratificante que he vivido.
Asistí a una jornada de anillamiento científico en San
Fernando (Cádiz) y allí conocí a uno de los coordinadores de este hermoso
proyecto. Se trata de Limes Platalea (Sociedad Gaditana de Historia
Natural). Descubrieron el corredor y paso migratorio de las Espátulas hace 4 años;
Tiempo que llevan estudiando este fenómeno junto a la colaboración de decenas
de voluntarios. Merece la pena pasar por su blog para conocer al detalle el
salto de las Espátulas hacia África. limesplatalea.blogspot.com.es
Me ofrecí como voluntario para esta campaña de 2015. Se
lleva a cabo en un fantástico mirador, la torre del puerco (Chiclana de la
Frontera).
Desde aquí se divisa a la perfección y a gran distancia el castillo
de Sancti Petri, uno de los puntos clave de referencia para casi intuir la
llegada de las Espátulas.
Mi primer día fue a finales de Julio y ya tuve la suerte de
ver un “bando” de 3 Espátulas. Aquella mañana te vas más que satisfecho.
El mes de Agosto no es significativo en cuanto al paso de
aves y aunque se haga un cero esa mañana, siempre es positivo conocer a compañeros
y veraneantes de toda la península y Europa que se acercan a preguntar qué
hacemos allí sentados en nuestras sillas, con prismáticos y telescopio. Siempre
se da alguna anécdota o caso curioso.
El paso fuerte de aves llega en el mes de Septiembre. No hay
forma para describir exactamente que siente un “bichero”, aficionado,
naturalista, ornitólogo o veraneante cualquiera que estaba por allí, al ver un
bando de 40 o 50 Espátulas en forma de V que te pasa por encima de la cabeza a
media altura. Estas aves tienen un encanto especial, su pico alargado, la
envergadura alar y patas largas, su blanco plumaje…todo ello hace un contraste,
un destello luminoso sobre el cielo a su paso. IMPRESIONANTE!.
Al pasar por la torre, otro de los momentos importantes es
si continúan costa abajo y cuando cruzan hacia África. Se puede apreciar como
giran en dirección Sur y se adentran en el mar para atravesar ese grueso
atlántico. En ningún caso llegan hasta el estrecho de Gibraltar para cruzar
(por ello no se conocía esta migración).
También debe ser una pasada verlas llegar desde Marruecos. Y
como continúan por la misma costa atlántica Marroquí para llegar a su lugar de
invernada, Senegal.
Es una travesía muy arriesgada y agotadora. Para que les sea
más fácil deben elegir bien ese preciso momento y que las condiciones de
visibilidad y viento sean favorables.
Según qué condiciones son determinantes para ellas a la hora
de escoger una altura de vuelo y la distancia que les separa o no de la costa antes de dar el salto. Hay bandos que ya se ven venir mar adentro. Estos a
veces pasan justo por la línea del horizonte o incluso van “espumando”, a ras
del agua, lo que las hace a veces invisibles para nosotros. Aquí se puede apreciar ese aspecto visibilidad-invisibilidad:
Otras veces dada la refracción de la luz del sol y la bruma, no se ve el bando de frente desde lejos, ya te las encuentras casi encima de ti.
Es importante saber cuántos pollos de ese mismo año van en el bando. Se
distinguen porque las puntas de las alas son negras.
Todos ellos cuando
alcancen la madurez sexual a los 3 años de edad, ya conocerán la travesía que
les traerá para criar en algún lugar de España o Europa. Otro de los datos importantes son pollos seleccionados de las colonias de marismas del Odiel y de la bahía de Cádiz. Se identifican gracias a que les pintan de rojo (se va con el tiempo y la lluvia) parte de las plumas alares. Las de la bahía están pintadas en el ala izquierda y las de Odiel en la derecha. Tuve la suerte de haber visto dos de estos y es muy gratificante.
En un total de 148 horas de observación, he visto 18
amaneceres:
Cientos de aves marinas como Gaviotas reidoras, de Audouin, Charranes
patinegros, bandos en migración de Moritos, de Cormoranes:
Bandos de Alcatraces, de
Flamencos, de Garzas reales, hasta un Halcón peregrino, un Azor o un Aguilucho
pálido, miles de fringílidos, 11 Ibis eremita y lo más importante en cuestión, las Espátulas: 32
bandos, 1.045 Espátulas en total, 72 pollos (2 con marca alar). Todo ello sin contar las que han
retornado por malas condiciones.
El bando más grande que he visto ha sido de 76
individuos, considerado ya como un bando mediano-grande, coincidiendo con mi
mejor mañana en número de Espátulas totales (332). Una pasada!!.
Sin olvidarme de muchos compañeros a los que he conocido, no tiene precio.
Ojalá esté por aquí en la campaña de 2016. Os invito a
conocer el paso migratorio de las Espátulas en un entorno inmejorable de
hermosas playas.
Hay que vivirlo para contarlo.
Hasta pronto. Un saludo.
Fascinante aventura, sin duda, Dani. Me ha encantado revivirla de nuevo leyéndote. El año que viene más :)
ResponderEliminarGracias Chus por leerme. Espero estar por aquí y poder participar de nuevo. :)
EliminarSe nota que "lo vives".Un placer y un orgullo leerte,niño.
ResponderEliminarMuchas gracias hermano. Sin duda, un gran apasionado de las aves lo siente así!
EliminarTambién hay emociones fuertes dentro de esta afición tan "pasiva" y tranquila. :)